ProMéxico cesa operaciones, las embajadas promoverán el comercio

Para finales del mes de febrero, las 46 oficinas de ProMéxico alrededor del mundo deberán cesar todas sus operaciones. Desde 2007, esta agencia del gobierno era la responsable de promover el comercio, exportaciones e internacionalizar las compañías mexicanas, un trabajo que se destacaba promoviendo la presencia de decenas de empresas mexicanas en las más importantes ferias de alimentos y bebidas en Estados Unidos.

Esta decisión de cerrar ProMéxico fue tomada por el presidente de México Andrés Manuel López Obrador, quien dijo que las embajadas ahora serán las encargadas de promocionar la economía del país.

El Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem), que fue establecido para apoyar a los emprendedores y a las micro, pequeñas y medianas empresas mexicanas también dejará de prestar servicios. Las funciones de este organismo pasarán a cargo de la Secretaría de Economía.

“Lo digo de manera respetuosa, no hay aquí en la Ciudad de México y en el país un ProFrancia, un ProAlemania, son las embajadas de esos países los que hacen el trabajo de promoción; por eso ya no vamos a tener ProMéxicos en 60 ciudades del mundo”, dijo el presidente López Obrador, en el marco de la XXX Reunión de Embajadores y Cónsules.

El mandatario dijo que los fondos que se destinaban a ProMéxico van a ser utilizados para la construcción del Tren Maya y así promover mejor el turismo del país. El proyecto es una obra de más de 1,500 kilómetros con la que se busca generar conectividad en toda la península de Yucatán.

La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) había propuesto al Congreso de la Unión un presupuesto para ProMéxico de $908.8 millones de pesos en 2019.

La secretaria de Economía de México, Graciela Márquez Colín, dijo a medios de comunicación mexicanos que para sustituir a ProMéxico y el Inadem, se creará una Unidad de Innovación y Promoción, la cual retomará las funciones de ambos organismos.

Para la funcionaria, ProMéxico no atendía las necesidades del país, porque aproximadamente ocho de cada 10 proyectos que se apoyaban tenían que ver solamente con la industria automotriz y la mayoría era para grandes empresas como BMW y «podrían haber sido más efectivos para otras cadenas de valor”.

ProMéxico estaba dirigida por Paulo Carreño, en la entidad laboraban cerca de 200 empleados en Ciudad de México y en sus 28 oficinas regionales. Según su página web , entre 2013 y 2018 atrajo inversiones por $87,932 millones de pesos, promovió la creación de 316,067 empleos y además impulsó 5,028 proyectos de exportación por valor de $18,051 millones de pesos.

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“La desaparición de ProMéxico es uno de los grandes temas que al sector exportador le está afectando y genera problemas para las micro, pequeñas y medianas empresas que tienen deseos de incursionar al mercado internacional”, dijo a la publicación mexicana Mileno, Juan Carlos Botello Osorio, investigador de la Facultad de Comercio y Estrategia Internacional de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla.

El investigador consideró que si bien el gobierno federal ha instruido que se otorgue capacitación a personal de las embajadas para que estas instancias se encarguen de asesorar a los empresarios interesados en exportar, tal como lo hacía ProMéxico, la curva de aprendizaje será lenta y ello paralizará las actividades de estas compañías al exterior del país.

Durante la XXX Reunión Anual de Embajadores y Cónsules (REC), realizada en la Ciudad de México a comienzos de enero, las secretarías de Economía y de Relaciones Exteriores firmaron un Convenio de Colaboración para el traspaso de funciones de promoción de las exportaciones y atracción de Inversión Extranjera Directa.

Según El Economista, el convenio firmado entre ambas secretarías proporciona un marco de acción para la instrumentación de una estrategia de promoción económica de México en el mundo que “optimiza los recursos” y coloca como ejes prioritarios el apoyo a las empresas mexicanas para integrarse a las cadenas globales de valor, en particular a las micro, pequeñas y medianas empresas, así como el incremento del contenido nacional en las exportaciones.