Estados Unidos se consolidó como el principal mercado de los productos de harina de maíz, tortillas y wraps elaborados por la compañía global mexicana de alimentos Gruma con el 55% de ventas netas el año pasado.
La multinacional mexicana ha logrado importantes crecimientos en ventas en Estados Unidos gracias al lanzamiento de productos más saludables, como las tortillas bajas en carbohidratos y libres de gluten, el incremento de restaurantes de comida mexicana y empresas productoras de tortilla.
De acuerdo a un comunicado de prensa, Gruma destacó que en 2018 las ventas netas de las operaciones de la compañía fuera de México representan el 73% de sus cifras consolidadas, el 55% lo aporta EEUU, Europa el 7%, Centroamérica 6% y Asía y Oceanía 5%.
En lo que respecta al flujo operativo (EBITDA) de la empresa, las operaciones en el extranjero contribuyeron con el 75 % del total. En este rubro, Estados Unidos aporta el 64%, Europa 4%, Centroamérica 4%, Asia y Oceanía 3%.
Fundada hace 65 años en Nuevo León, México, Gruma es reconocida entre los hispanos principalmente por su marca de harina de maíz Maseca y en Estados Unidos, con la marca Mission, es una de las principales vendedoras de tortillas, flatbreads, wraps, tortilla chips y taco shells entre otros productos.
Por otra parte, en Europa, la empresa ha logrado importantes crecimientos en ventas de grits para snacks al captar nuevos clientes en Italia, Turquía e Israel.
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En lo referente al negocio de tortilla, éste ha aumentado debido al lanzamiento de nuevos productos, la fidelidad de nuevos clientes en el canal minorista del Reino Unido, Alemania e Italia y exportaciones al norte de África desde el viejo continente. Además de un mayor consumo de wraps en cadenas globales de restaurantes de comida rápida y para platillos típicos del Medio Oriente en restaurantes locales.
En Rusia, las ventas de Gruma han venido creciendo a tasas superiores a 15% anual, debido a la aceptación de sus productos, tanto en el canal de restaurantes como en el de autoservicios. Este mercado se atiende a través de la planta de Gruma, que cuenta con tecnología ecológica de última generación, y cuenta con una capacidad para producir anualmente de más de 50,000 toneladas de tortilla de trigo y frituras de maíz utilizando materias primas y granos cultivados en Rusia. La mayoría de las inversiones de Gruma en 2018 se destinaron a incrementar la capacidad de producción en las plantas de Estados Unidos, Asia, Oceanía y Europa, alcanzando los $209 millones. En el primer trimestre de 2019 se invirtieron otros $50 millones, informó la compañía.