Anthony Peña: El arribo de la nueva generación de dueños de supermercados hispanos

Durante el último año, Anthony Peña ha dedicado todo su tiempo a la administración de los siete supermercados Save A Lot que adquirió en Massachusetts y Rhode Island. Es un sueño hecho realidad que logró a punta de mucho trabajo y de las lecciones que ha aprendido como joven empresario hispano en la industria de supermercados.

Peña, de 36 años de edad, afirma que su pasión por el negocio de las tiendas de comestibles lo lleva en la sangre. Cuando sus padres emigraron de República Dominicana a Estados Unidos, abrieron una tienda, donde él se la pasaba jugando cuando era niño, y ya más grande, durante su tiempo libre después de la escuela y en vacaciones, ayudaba a su padre en las labores del negocio. Desde entonces, tuvo la certeza que seguiría los pasos de su progenitor para convertirse también en propietario, no de uno, sino de varios supermercados.

Para complacer a su madre, asegura Peña, se graduó con el título de finanzas y administración de empresas, “pero yo sabía que el trabajo en los supermercados era lo que me iba a generar beneficios y me acuerdo de que mi papá y mi mamá siempre me decían, ¿cómo tú vas a controlar tu futuro y tu destino si no está en tus manos? Por eso yo siempre vi que mi papá tenía esa libertad y eso me gustaba”.

De izquierda a derecha, Frank Zapata, William Rodríguez y Anthony Peña.

En este proceso de crecimiento profesional, Peña aprendió que a veces no es fácil traer nuevas ideas al negocio, cuando ya se ha impuesto un método de trabajo basado en la experiencia. Las nuevas generaciones quieren innovar y poner en práctica lo que aprendieron en las universidades, pero sus padres, que han sacado sus negocios adelante a base de duro trabajo, ganando experiencia durante toda una vida, son reacios al cambio.

En su misión de ganar experiencia y conocer más a fondo la industria, Peña se unió a la National Supermarkets Association, con sede en Nueva York. Conoció a gran cantidad de hispanos dueños de supermercados y a sus hijos, las nuevas generaciones que, como él, ahora trabajan en sus negocios familiares ofreciendo innovadoras propuestas para tener tiendas más eficientes en un competitivo mercado.

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Después de conocer el fracaso y verse obligado a cerrar una tienda, el empresario hispano hizo una pausa para recapacitar y buscar la manera de crecer para asegurar un mejor futuro. “La lección que aprendí es que debo hacerle caso a mi instinto, a escuchar los consejos de mis mentores, y que hay que creer en ti mismo. Yo pensaba que lo sabía todo y en realidad no era así”, dijo Peña.  

Y hace dos años, se le presentó la oportunidad de crecer. La corporación Save A Lot le ofreció cuatro supermercados en el área de Massachusetts que tenían un gran potencial, a pesar de que los establecimientos estaban en malas condiciones.

Con el apoyo de sus padres, sus mentores de la NSA y otros familiares, Peña adquirió las tiendas y, en noviembre pasado, compró otras tres en Rhode Island. Ahora están en un proceso que Peña describe como “darles el toque humano”, dándole más atención a los empleados, mejorando el servicio a los clientes, que en su mayoría son hispanos, y se disponen a comenzar el proceso de remodelación de los locales.

Anthony Peña sabe que ya tiene marcado el camino del éxito porque está dispuesto a trabajar sin descanso, y tiene el respaldo de su familia y de la NSA, una reconocida asociación de tenderos.

Su principal deseo es dejar en alto el nombre de su comunidad hispana, de enaltecer sus valores y ofrecer un legado para las generaciones futuras. El triunfo siempre llega siempre y cuando se está dispuesto a prepararse, confiar en sus instintos y escuchar los buenos consejos.