En el Mes de la Herencia Hispana celebramos algo más que la unión de nuestras culturas. Celebramos también nuestro crecimiento como comunidad, como familias y como profesionales. Si nos enfocamos en nuestro sector de los supermercados, el factor humano es también clave en la gestión de todos nuestros equipos, asociados, directivos y proveedores.
Desde un punto de vista competitivo, nuestra comunidad está ya consolidada en todos los escalafones de la industria y por tanto, también con una serie de presiones en cada una de las responsabilidades, como son:
- La gestión ante nuestros líderes donde la exigencia con los resultados suele ser siempre alta y constante, de acuerdo con la cultura de nuestras empresas.
- La gestión de nuestros equipos donde debemos cuidar siempre de mantener a todos los asociados animados, motivados y enfocados a los objetivos.
- La gestión de la familia, porque los horarios en los supermercados son largos y debemos de ser capaces de lograr que dichos horarios sean sostenibles en el tiempo de acuerdo con una conciliación familiar para nuestros colaboradores.
Con unos equipos humanos motivados y enfocados en sus objetivos, debemos fijarnos en el estado actual de nuestros supermercados. Las nuevas tendencias están definiendo el nuevo panorama del retail, adaptándose a contrarreloj para seducir a las nuevas generaciones y mantener la competitividad ante el avance del comercio electrónico.
Los avances tecnológicos han abierto un nuevo abanico de posibilidades en nuestro sector, facilitando el proceso de compra y ampliando la información que el cliente tiene a su disposición.
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Los proveedores virtuales o la tecnología 3D han saltado de la ciencia ficción a los puntos de venta y los consumidores son cada vez más exigentes al respecto. Prueba de ellos, por ejemplo, son la cantidad de dispositivos que ya empezamos a observar en nuestros supermercados latinos desde donde podemos extraer una gran información de tráfico de clientes, consumo, cuánto tiempo permanecen en nuestras tiendas, etc.
Algo que también puede verse en las tiendas es la identificación por radiofrecuencia, que permite recordar qué clientes han visitado el establecimiento anteriormente y poder así ofrecerles unos beneficios u ofertas sólo por volver.
La tecnología se está convirtiendo en parte de la experiencia de compra fuera de la tienda. El cliente ya puede encontrar espacios en los centros comerciales con zonas interactivas que sumergirán a los compradores en la historia de la marca, así como fachadas de tiendas y escaparates digitales.
La aparición de formatos de tiendas tipo low cost o hard discount, la posibilidad de comparar precios en línea antes de realizar la compra y los nuevos hábitos de consumo, han aumentado la sensibilidad por el precio a la hora de tomar la decisión de compra.
Buscar un precio más barato ya no depende de la capacidad económica del comprador, sino que se ha convertido en un estilo de vida.
En particular, los clientes que suelen realizar más de dos compras semanales en supermercados son los más exigentes a la hora de buscar una buena relación calidad precio y los menos propensos a preocuparse por cómo son los artículos. Para cubrir esta necesidad, el consumidor podrá recibir vales y ofertas directamente en su celular y comparar los diferentes precios en línea.
Toda esta sociedad entre nuestro capital humano y el tecnológico definirá nuestro futuro más próximo y logros que conseguiremos como empresa. Felicidades a toda la comunidad latina por el Mes de la Herencia Hispana, en especial a nuestro sector de los supermercados y a los que nos dan voz como la Revista Abasto.