A medida que nos acercamos a 2025, el sector minorista sigue experimentando una rápida transformación, con tecnologías emergentes que están remodelando las experiencias de los clientes, las operaciones y los modelos de negocio. Los minoristas que se adapten a estas tendencias seguirán siendo competitivos, pero aquellos que alineen estratégicamente estos avances con su base de clientes única podrán prosperar.
Para los minoristas hispanos, aprovechar estas tendencias no consiste sólo en seguir siendo relevantes, sino en crear una ventaja cultural y económica.
1. Inteligencia artificial (IA) y aprendizaje automático (AM)
Ya he hablado de la IA y el AM en mis anteriores columnas, pero en 2025 serán aún más omnipresentes.
Los análisis predictivos y las recomendaciones personalizadas permitirán a los minoristas adaptar sus ofertas a las necesidades individuales de los clientes con mayor eficacia.
Los minoristas hispanos, con sus profundos lazos culturales y sus operaciones basadas en la comunidad, pueden utilizar la IA para ofrecer productos y servicios personalizados que reflejen las preferencias de sus clientes. Por ejemplo, las herramientas de IA que analizan el comportamiento de compra pueden sugerir alimentos tradicionales hispanos o productos vinculados a festividades específicas como el Día de los Muertos o el Mes de la Herencia Hispana.
Estos sistemas también pueden automatizar tareas mundanas como la gestión de inventarios, lo que permite a las pequeñas empresas centrarse en el servicio al cliente y el compromiso con la comunidad, elementos cruciales de su modelo de negocio.
Artículo Relacionado: Cómo la IA y los carros inteligentes transforman la experiencia compra en la tienda
2. Compras omnicanal
La compra omnicanal es otro tema sobre el que he informado y sigue existiendo una línea difusa entre el comercio minorista físico y el digital.
Los minoristas hispanos, en particular los de comunidades desatendidas, pueden aprovechar esta tendencia para ampliar su alcance sin necesidad de una expansión significativa del comercio físico.
Ofrecer una experiencia de compra fluida en aplicaciones móviles, sitios web y plataformas de medios sociales puede ayudar a los minoristas a conectar con los clientes hispanos conocedores de la tecnología, que cada vez recurren más a las compras en línea.
La integración de WhatsApp, muy popular entre las comunidades hispanas, en el servicio al cliente y en las experiencias de compra será esencial.
Al crear una experiencia integral, los minoristas pueden fidelizar a sus clientes e impulsar las ventas repetidas.
3. Comercio por voz y procesamiento del lenguaje natural (PLN)
Para el próximo año, el comercio por voz será aún más habitual, permitiendo a los clientes realizar compras a través de asistentes de voz como Amazon Alexa.
Los minoristas hispanos pueden aprovechar esta tendencia asegurándose de que sus listados de productos y servicios sean accesibles a través de comandos de voz. En particular, será crucial ofrecer asistencia bilingüe tanto a los clientes de habla inglesa como a los de habla hispana.
El PLN ayuda a los tenderos a comprender mejor las necesidades de su diversa base de clientes analizando no sólo lo que compran, sino también cómo hablan de los productos.
Para aprovechar al máximo estas tendencias, los minoristas hispanos deben invertir en educación y formación sobre las últimas tecnologías de venta al por menor.
Asociarse con empresas tecnológicas o asociaciones de minoristas que ofrezcan recursos y herramientas será fundamental para navegar por este panorama en rápida evolución. Además, las pequeñas y medianas empresas pueden trabajar juntas para crear oportunidades de negociación colectiva para las inversiones en tecnología.
Los tenderos hispanos tienen una oportunidad única de aprovechar estas tendencias tecnológicas manteniéndose fieles a sus valores orientados a la comunidad y culturalmente ricos.