Las industrias alimentaria y de agricultura y sus proveedores contribuyen con más de 8.6 billones de dólares -o casi el 20%- a la economía de Estados Unidos, casi una quinta parte de la producción nacional total y un aumento del 22% desde 2019, según el séptimo informe anual Feeding the Economy.
Proporcionando datos sobre empleos, salarios y producción económica, este análisis de la granja a la mesa ilustra el impacto del sector agroalimentario en la actividad económica local y nacional.
Los datos también subrayan la resistencia y fiabilidad de este sector en medio de crisis mundiales y nacionales sin precedentes, incluida la crisis de los productos básicos tras la guerra en Ucrania y las continuas interrupciones de la cadena de suministro.
El estudio de impacto económico del sector agroalimentario Feeding the Economy representa las contribuciones de una combinación muy amplia de industrias.
«Desde el sector agrícola hasta la venta al por menor de alimentos, la venta al por mayor y los fabricantes de productos, toda la industria alimentaria conecta a los compradores con los productos esenciales que necesitan para mantener a sus familias sanas y nutridas», dijo Leslie G. Sarasin, Presidente y CEO del FMI – The Food Industry Association. «El estudio Feeding the Economy de este año sigue demostrando el poderoso impacto económico del sector de la alimentación y la agricultura en la alimentación de América y el crecimiento de la economía de la nación – responsabilidades que todos nos tomamos muy en serio».
El informe de este año muestra que el sector de la alimentación y la agricultura de EEUU apoya directamente a casi 23 millones de puestos de trabajo, proporciona $927,000 millones en salarios, y es particularmente vital para las comunidades rurales de todo Estados Unidos.
En general, más de 46 millones de puestos de trabajo son apoyados a través de la cadena de suministro de alimentos y agricultura, aumentando casi un 2% desde el informe de 2019 a pesar de los desafíos económicos y las interrupciones asociadas con la pandemia mundial.
Los 50 estados mostraron un aumento de la producción económica en el informe de 2023 en comparación con el informe de 2022, lo que refleja en gran medida un repunte de la actividad económica nacional. Los mayores aumentos en la producción total se registraron en Hawai (31%), Dakota del Norte (26%), Nueva York (23%), Nevada (22%) y Florida (21%).
Entre las principales conclusiones de los datos nacionales cabe citar:
- Total de empleos: 46,283,917 (un 1.5% más desde el informe de 2019)
- Salarios totales: 2.61 billones de dólares (un 26.2% más desde el informe de 2019)
- Impuestos totales: $947,930 millones (un 3.8% más desde el informe de 2019)
- Exportaciones: $202,200 millones (un 24.4% más desde el informe de 2019)
Impacto económico total de la industria alimentaria y agroalimentaria: 8.6 billones de dólares (un 21.8% más desde el informe de 2019)
La fortaleza y el crecimiento destacados en el informe de este año refuerzan que la agricultura está evolucionando e innovando para satisfacer las demandas del siglo 21.
«El sector de la alimentación y la agricultura sigue siendo robusto, y los operadores de comestibles independientes desempeñan un papel importante en ese éxito, impulsando las ventas y los empleos directa e indirectamente relacionados con la industria», explicó Greg Ferrara, Presidente y CEO de la National Grocers Association. «Los supermercados independientes llevan la nutrición a las personas con inseguridad alimentaria, apoyan a las instituciones comunitarias y están en primera línea en tiempos de crisis. En los vecindarios de todo Estados Unidos, urbanos y rurales, los operadores independientes anuncian comunidades vibrantes: son motores del crecimiento económico».
Según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, entre 1948 y 2019, el uso de la tierra para la agricultura disminuyó un 28%, mientras que la productividad de la tierra creció casi cuatro veces y la productividad laboral creció más de diez veces. De hecho, la tasa de crecimiento de la productividad total de los factores de la agricultura se encuentra entre las más altas de los sectores estadounidenses.