ROI en inversiones de tecnología
ROI (las siglas en inglés) significa Return On Investment. Es una forma tangible de medir los beneficios percibidos a cambio de una inversión hecha por un negocio. Se calcula dividiendo el dinero que genera una inversión (beneficio) por el dinero que costó hacer esa inversión (costo). Un ROI positivo (mayor a cero) significa que el beneficio es mayor al costo y fue una buena inversión. Un ROI negativo (menor a cero) significa que el dinero que costó es mayor al beneficio y fue una mala inversión. Un ROI de cero significa que sólo pudo recuperar la inversión, un resultado igualmente negativo. Antes de llevar a cabo cualquier inversión se debe calcular el ROI para confirmar que ésta realmente vale la pena.
Vale la pena estimar lo mejor posible los costos y beneficios siempre tomando en cuenta estos consejos.
En el sector minorista, a veces es difícil calcular correctamente el ROI de una inversión. Por ejemplo, ¿cómo calcula el beneficio de instalar un sistema de seguridad? Si le iban a robar pero luego después de ver el sistema no lo hacen, nunca sabrá que se salvó de un gran problema. En otros casos toma mucho tiempo recuperar el beneficio, como puede ser el caso de un sistema nuevo de punto de venta. El costo tiene que pagarlo hoy pero puede tomar años percibir el beneficio. Estos asuntos no siempre tienen una solución precisa, pero vale la pena hacer el esfuerzo y estimar lo mejor posible los costos y beneficios siempre tomando en cuenta estos consejos:
1. Tome en cuenta los tiempos.
Un dólar gastado hoy no tiene el mismo valor que un dólar gastado en 5 años. Igual para un dólar ganado. Si los costos o los beneficios ocurren durante el transcurso del tiempo, tiene que ajustarle el valor para tomar en cuenta este tiempo. Puede quitarle un 4% por cada año que tiene que esperar para recibirlo o gastarlo.
2. Consulte a tus empleados proveedores y clientes.
Estas personas tienen una perspectiva distinta a la suya como dueño. Pueden informarle sobre ciertos gastos de lo cual no está al tanto. Quizá el nuevo sistema de punto de venta que quiere comprar no es compatible con el sistema del proveedor y requiere una programación personalizada para hacerlo funcionar.
3. Compare sistemas personalizados y estándares.
Con la tecnología existe la opción de comprar programas y equipos estándares con una habilidad muy limitada para personalizarlas. También existe la opción de contratar a consultores y programadores para que desarrollen soluciones personalizadas para su negocio. Los estándares pueden ahorrarle mucho dinero (hasta un 80% o más) comparado a un sistema hecho exclusivamente para su negocio. También es más sencillo conseguir las actualizaciones, futuras mejoras y distintos expertos para ayudarle con su uso. Pero más que seguro tendrá que adaptar su negocio para las limitaciones de estos sistemas. En la gran mayoría de negocios retail se genera un mejor ROI adaptándose a un sistema estándar en vez de optar por desarrollar un sistema totalmente personalizado.