5 Beneficios de la inteligencia artificial para los supermercados 

Las herramientas que ofrece la inteligencia artificial para supermercados (IA) están transformando la forma como se manejan estos negocios en muchas partes del mundo.

Esta tecnología es capaz de brindar información detallada acerca de los consumidores.

Desde la edad, sexo, gustos y estado de ánimo al momento de visitar el establecimiento.

Además, automatiza todos los procesos para disminuir el tiempo que tardan en ser atendidos y efectuar sus compras.

La espera es uno de los factores que más impacta a los usuarios en una tienda física. Pero la IA detecta cuando las filas están más largas de lo común.

Eso permite que los administradores tomen acciones en tiempo real, para optimizar sus operaciones y mejorar la experiencia de los clientes.

Por eso, se ha convertido en una pieza clave de la estrategia comercial y una tendencia en crecimiento que suma valor.

Además, habla mucho de cómo serán los negocios minoristas en el futuro.

5 Beneficios de la inteligencia artificial para supermercados 

La tecnología basada en la inteligencia artificial para supermercados ofrece muchos beneficios tanto para el consumidor como para el sector de retail. Estos son los principales:

1.  Personalización de ofertas

Al poseer información relevante de los consumidores que caminan por los pasillos de comestibles, los minoristas pueden hacer promociones personalizadas.

Pues, saben cuáles son sus preferencias en cuanto a comidas, si son alérgicos a algún alimento y que los motiva a comprar determinado artículo.

Adicionalmente, el análisis del comportamiento de los usuarios les permite organizar los productos de forma más eficiente.

Los consumidores se enteran por medio de diversos canales de cuáles son las ofertas y en qué momento les conviene comprar.

Este enfoque genera una agradable experiencia y atrae compradores a la tienda.

2. Monitoreo del inventario 

La inteligencia artificial también sirve para que los supermercados monitoreen en tiempo real el inventario que poseen.

Los robots resuelven los problemas relacionados con los bienes, evitando que se agoten. 

¿Cómo lo hacen? Escaneando el etiquetado y los precios.

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Los algoritmos que usan, captan esa información y la examina automáticamente, facilitando la comprobación de productos extraviados o con el costo incorrecto.

De ese modo, el comercio asegura la disponibilidad de los comestibles más demandados y evita el desperdicio de alimentos.

De igual forma, las máquinas inteligentes ayudan a los empleados con las entregas de productos, por lo que los compradores los reciben más rápido.

3. Disminución de robos

Otro de los beneficios que brinda la IA es aminorar los robos en las tiendas minoristas, ya que es capaz de detectar cualquier comportamiento inusual e inadecuado.

Ya sea entre las personas que visitan el establecimiento o los propios empleados.

Por eso, cada vez más negocios están incorporando computadoras que ayudan a los encargados de la seguridad a identificar intentos de robos.

El sistema registra las actividades sospechosas y notifica a la gerencia cuando alguien está escondiendo un artículo en su cartera o bolsillo. 

O cuando un cajero finge pasar el código de barras por la máquina, con un fin malicioso.

4. Control del flujo de personas

Los supermercados del futuro también controlan la cantidad de usuarios que hay dentro del local, gracias a esta tecnología.

Mediante sensores especiales de rastreo, supervisan el flujo con el objetivo de evitar aglomeraciones que incomoden a los compradores.

Actualmente, hay empresas que utilizan semáforos inteligentes para dirigir el paso hacia determinadas áreas.

Cuando la cantidad de personas sobrepasa el límite preestablecido, se enciende una luz roja. Es señal de que no hay acceso hasta que se descongestione el lugar.

La luz verde indica que hay suficiente espacio libre o distanciamiento. Y abre la puerta para que entren otros consumidores a ver los productos y realizar sus compras.

5. Optimización de los pagos 

Los comercios minoristas equipados con estas herramientas ofrecen procesos de pago más ágiles para todos los clientes.

La inteligencia artificial identifica los productos que colocan en el carrito de compras y contabiliza automáticamente el monto que deben pagar.

Luego, lo carga a la tarjeta bancaria del usuario, evitando de esa manera que haga una cola para ser atendido por un cajero.

Eso no significa necesariamente privar al trabajador de su empleo, ya que puede asumir otro rol dentro de la empresa.

Por ejemplo, el de anfitrión, para que los consumidores se sientan mejor atendidos.

Adaptación de los supermercados del futuro

Hoy en día, muchos negocios están intentando adaptarse a esta nueva tendencia, con la finalidad de ser más eficientes y mejorar las ventas.

Aunque las compras en líneas se han vuelto comunes, la mayoría de la gente prefiere mirar personalmente los artículos y tocarlos.

Por eso, sigue visitando los establecimientos físicos de comestibles. Los encargados buscan satisfacer a ambos tipos de clientes.

Y, la mejor manera de hacerlo, es brindándoles un buen servicio y comodidad a la hora de efectuar sus compras en persona.

Las empresas minoristas estadounidenses son unas de las que más están invirtiendo en este modelo de tecnología.

Según la guía de gastos IDG Communications, se prevé que la inversión alcanzará los $120.000 millones para el 2025.

Eso equivale a un crecimiento cercano al 20% en los 19 sectores económicos, incluyendo el de comestibles, de acuerdo con la firma consultora.

Desafíos para el sector

Para la industria, implementar esta clase de soluciones supone un enorme reto, debido a lo costoso que resulta.

El costo varía dependiendo del tipo de software, cantidad de datos que procesa, la calidad, nivel de inteligencia y la precisión de las predicciones.

Por otro lado, necesita contratar talento adecuado y demostrar que los datos recabados por la IA no se verán comprometidos.

El abuso o falta de transparencia en cuanto al uso de la información de los clientes podría afectar su relación con ellos.

Además, muchos empleados todavía temen ser reemplazados por las máquinas.

A pesar de estos desafíos, es un hecho que la inteligencia artificial para supermercados llegó para quedarse. Los supermercados del futuro serán más inteligentes.

Reconocidos almacenes y cadenas de comestibles ya han integrado con éxito esta tecnología.