Ya sea buscando nuevos productos, comprando por impulso o buscando inspiración para las comidas, casi 2 de cada 3 adultos estadounidenses (65%) dicen que a menudo compran artículos no planificados en el pasillo de los lácteos, según una encuesta reciente de la Asociación Nacional de Alimentos Congelados y Refrigerados (NFRA, por sus siglas en inglés).
Esta tendencia es aún mayor entre la Generación Z y los millennials (74% cada uno).
Se encuestó a más de 2,000 consumidores, lo que proporcionó información sobre las actitudes y comportamientos de los consumidores adultos de EE.UU. en el pasillo de los lácteos en relación con los beneficios para la salud, la inclusión de alternativas a los lácteos, la propensión a las marcas premium, etc.
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Beneficios para la salud y exquisiteces en el pasillo de los lácteos
En cuanto a los beneficios para la salud, las opciones en el pasillo de lácteos destacan junto con las verduras, las frutas y las carnes magras. Los resultados de la encuesta muestran que los huevos (74%), el yogur (67%) y el queso (63%) son las principales opciones para los consumidores preocupados por la salud debido a su contenido en macronutrientes y proteínas. Más de la mitad de los adultos estadounidenses (52%) afirma que tanto los macronutrientes como las calorías son igualmente importantes a la hora de consultar las etiquetas nutricionales, y el 81% está de acuerdo en que los productos lácteos como el yogur o el requesón proporcionan un desayuno fácil y rico en proteínas.
“Los consumidores prestan cada vez más atención a la nutrición y a la diversidad de opciones en el pasillo de los productos lácteos, garantizando que las comidas preparadas en casa no sólo sean deliciosas, sino que también estén repletas de beneficios para la salud”, afirma Tricia Greyshock, presidenta y directora general de la NFRA. “Los productos innovadores, incluyendo una creciente gama de alternativas lácteas, continúan mejorando las opciones disponibles para las familias, haciendo más fácil que nunca disfrutar de comidas nutritivas y variadas.”
Al igual que ocurre con los productos convencionales del pasillo de los lácteos, los consumidores estadounidenses también consideran saludables las alternativas a los lácteos. Casi 3 de cada 5 adultos estadounidenses (57%) describen las alternativas lácteas, como la leche de almendras o de avena, como “saludables”. Esta opinión aumenta entre los adultos de la Generación Z (65%) y los millennials (61%). Pero lo importante es señalar que no se trata de una cosa o de la otra. Algunos consumidores se han flexibilizado hacia nuevos hábitos de compra y consumo de alimentos.
Los hábitos flexitarianos de moda salvan la brecha dietética
Adoptar un enfoque flexitariano en el consumo de lácteos parece ser una práctica común para muchos adultos, que con frecuencia compran tanto productos lácteos tradicionales como alternativas, como leche de almendras y de soya. Esta tendencia es particularmente fuerte entre la Generación Z y los millennials, con un 71% y un 72% respectivamente que adoptan este comportamiento.
El flexitarianismo, una dieta que consiste principalmente en alimentos de origen vegetal, aunque permite la inclusión ocasional de productos de origen animal, está ganando popularidad. Durante la misma visita al supermercado, el 61% de los adultos estadounidenses afirman que a menudo compran juntos productos lácteos y sustitutos de los lácteos.
Los padres muestran un comportamiento similar, ya que el 70% de los que tienen hijos en casa -la mayoría de los cuales son millennials- afirman seguir el mismo patrón. Es probable que este cambio se deba a la disponibilidad de diversas alternativas a los lácteos y a la evolución de los hábitos de compra de las generaciones más jóvenes, que asumen el papel de principales compradores en sus hogares.
Preferencia por las marcas premium
Los resultados de la encuesta revelan una notable tendencia de los consumidores a buscar marcas comerciales y de primera calidad, especialmente en lo que se refiere al yogur, el queso y la mantequilla. Casi la mitad de los adultos estadounidenses (45%) prefiere el yogur de marca, mientras que el 39% hace lo mismo con el queso y la mantequilla. Además, el 40% de los consumidores suele optar por el yogur de marca premium, seguido de cerca por el queso (37%) y la mantequilla (34%).
Comprar en el pasillo de los productos lácteos, ya sea en la tienda o de forma digital para recoger o entregar a domicilio, ofrece una amplia gama de opciones para disfrutar de excelentes comidas y otras delicias en casa.