General Mills reportó su séptima caída consecutiva en las ventas trimestrales el martes, afectada por la débil demanda de sus productos de yogur y horneado, ya que la compañía ofreció menos descuentos en medio de la competencia de precios en Estados Unidos.
El fabricante de cereales de desayuno Cheerios dijo que las ventas netas cayeron un 5,2 por ciento a 3,79 mil millones de dólares en el tercer trimestre finalizado el 26 de febrero, por debajo de la estimación promedio de los analistas de 3,82 mil millones de dólares, según Thomson Reuters.
General Mills, como sus rivales ConAgra Brands y Campbell Soup, se ha enfrentado a una demanda mediocre de sus alimentos procesados, ya que los gustos de los consumidores se desplazan hacia alimentos frescos y artículos considerados más saludables.
La compañía ha estado gastando menos en productos como Progresso y Pillsbury, reduciendo las promociones. Ha invertido más en negocios rentables como cereales Cheerios.
Los ingresos netos atribuibles a General Mills cayeron a $357.8 millones o 61 centavos por acción en el trimestre, de $361.7 millones o 59 centavos por acción, un año antes.
Excluyendo los artículos únicos, la compañía ganó 72 centavos por acción, superando la expectativa promedio de analista en un centavo.
Las acciones de General Mills, con sede en Minneapolis, bajaron un 1,3 por ciento a 59,50 dólares antes de la campana.
Segmento Asia y América Latina de General Mills
Las ventas netas del tercer trimestre en el segmento de Asia y América Latina de General Mills totalizaron 421 millones de dólares, lo que corresponde esencialmente a los resultados del año pasado. El intercambio favorable de divisas y el crecimiento del helado Häagen-Dazs fueron compensados por la reestructuración del negocio de aperitivos en China, el impacto neto de las desinversiones y adquisiciones en el año fiscal 2016 y las caídas en América Latina impulsadas por desafíos macroeconómicos. Las ventas netas orgánicas disminuyeron un 2 por ciento. Las ganancias operacionales por segmentos aumentaron a US $10 millones de US $2,5 millones el año anterior, reflejando los beneficios de la deflación de las materias primas importadas a ciertos mercados, y el impacto de las desinversiones en el año fiscal 2016.
A través de nueve meses, las ventas netas del segmento de Asia y Latinoamérica disminuyeron un 1 por ciento a $1,29 mil millones, debido al intercambio de divisas desfavorable y el impacto neto de desinversiones y adquisiciones en el año fiscal 2016. Las ventas netas orgánicas aumentaron 1 por ciento. Las ganancias operativas del segmento totalizaron $61 millones, un 45 por ciento más que lo reportado y un 48 por ciento en moneda constante.
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