California se convirtió en el primer estado de la Unión Americana en prohibir el uso de bolsas plásticas desechables en almacenes y tiendas con el fin de detener la contaminación en las calles y en los cuerpos de agua.
Este martes el gobernador de California, Jerry Brown, promulgó la ley SB 270, según la cual, las bolsas plásticas irán siendo eliminadas en las cadenas y los supermercados en el tercer trimestre de 2015 y en los comercios más chicos y farmacias en 2016. La ley no se aplica a las bolsas usadas para frutas, vegetales o carnes, ni a las usadas por otros minoristas. Además, permite a los comercios cobrar una cuota de por lo menos 10 centavos de dólar por usar bolsas de papel.
«Esta ley es un paso en la buena dirección, reduce el torrente de plástico que contamina nuestras playas y parques e incluso el océano», dijo el gobernador de California, Jerry Brown, en un comunicado anunciando la firma de la ley. «Somos los primeros en prohibir estas bolsas y no seremos los últimos».
Sin embargo, una coalición de fabricantes de bolsas plásticas anunció que buscará un referendo público para desechar la norma que entrará en vigencia en julio de 2015.
Los fabricantes de las bolsas de plástico se han resistido enérgicamente por medio de su grupo representante, que ha difundido avisos comerciales que censuran la prohibición por considerar que provocará la pérdida de miles de empleos.
La promulgación de la ley fue considerada como un éxito por los activistas que han promovido exitosamente prohibiciones similares en ciudades como Chicago, Austin y Seattle.
Padilla, autor del proyecto, dijo que los californianos rechazarán una campaña que busca un referendo y que adaptarán rápidamente su comportamiento para favorecer el ambiente.
En respuesta a la preocupación por la pérdida de empleos, el proyecto incluye 2 millones de dólares en préstamos a los fabricantes de bolsas plásticas para que cambien sus operaciones a fin de fabricar bolsas reusables en vez de desechables.